domingo, 31 de octubre de 2010

Si me ves entre el gentío sientes mi vacío y hablas...

Estaba atardeciendo, aunque para ello todavía quedara mucho. Lo sabía porque lo estaba sufriendo ya que el gracioso señor Sol lentamente bajaba del cielo para descansar de su caluroso día de trabajo cegándole así completamente su visión con sus destellantes rayos.

No esperaba nada de ese día, tan solo una grata noche con una buena compañía y una grandísima música sonando. Sentir la vibración que provocarían los altavoces en su cuerpo y ver a ciertos dioses. No se había imaginado el sitio, no había pensando con la canción que comenzaría el espectáculo ni nada semejante. Solo tenía la sensación de que iba a ser una experiencia única.
Y no se equivocó.

El sonido era aún más vibrante de lo que había pensando, nunca olvidaría tantas manos alzadas moviéndose con ritmo cada vez que la música rompía. Lo malos que eran los teloneros, los personajillos que se creía raperos y caminaban con “estilo”. El aire acondicionado refrescando el ambiente caluroso de tantos cuerpos sudorosos, lo cómodos que eran los sillones que al final terminarían pisando y hasta había una que termino saltando sobre ellos.
Tampoco olvidaría el olor a cigarro que había en el aire, las sonrisas de cómplice que se podían observar cada dos por tres, los ojos brillosos por culpa de la maldita ilusión que pueden provocar para unas dos personas pero para otras tres, los abrazos, los berridos y los chillidos de felicidad pura…
No olvidaría los escalofríos que sentía en la espalda, que no dejaron de producirse en toda la noche.  

Tampoco la grandiosa cena de tres paquetillos de papas junto con M&M's que pagó la que hora más tarde sería la cumpleañera, ni el sándwich de jamón y queso que desapareció con rapidez.  

¿Cómo olvidar el bonito final? Sentados en un banco, taxis delante nuestra, el cielo estrellado sobre cabezas con mucho pelo mezclado con el fresco agradable de la noche, el querer saber de una niña caprichosa las sorpresas que le aguardaban y el recuerdo de algo completamente inolvidable…